"Paso por una etapa muy conflictiva. Todo me parece ofensivo, todo está en mi contra y lo peor es que todo lo recibo directo. Desde hace algunos días he cambiado un poco, al menos en este último año, mi manera de vivir. Posiblemente esté transgrediendo mis ideales, que de paso sea dicho, no están muy bien forjados.
A mis veintiún años la vida no me ha tratado como todos quisiéramos que nos trate, pero en ocasiones el peso de esa lápida es demasiado extenuante. Se que debo de afrontar los problemas cara a cara y arremeter en contra de ellos de una manera tajante, de una manera contundente. Pero, el recuerdo de todo lo pasado es más fuerte, es más lacerante, hiere, duele.
¡Claro, mis ideales! Están ahí, creo que un poco empolvados y creo que tendré que reestructurarlos. Quiero despertar al presente, quiero ser yo y no sólo una visión de mi pasado. Al principio pensé que el ser rebelde, el escupirle al mundo y la sociedad podría traerme buenas cosas; la vida no se maneja a base de anarquías personales, no puedo cambiar el mundo si no me cambio de una manera integral a mi misma. Quise volver a lo de antes, a la represión que me tenía atada a ese pasado infantil que me atormenta hasta estos días y que hasta cierto punto cobija mis desgracias. Pero después de probar el sabor de la rebeldía interna, no hay retorno.
Ahora estoy tratando de acoplar esta confusión, hasta ahora inocua, a mi actual vida. No pretendo ser otra, quiero ser yo misma, una yo misma audaz. Capaz de resolver situaciones complicadas con la serenidad que tienen los grandes. Estoy en una etapa de un gran cambio, que implica el no herir a alguien más, que implica sacrificios y sumisión en aspectos de los cuales podré sacar ventaja. Es cuestión de escuchar y aprender. Pero sin herir, sin herirte. No lo quiero hacer, pero algo, ese algo que siempre está presente en las confusiones me ata a ti. Se que puedo estar agitando la bandera del naufragio y estás ahí para rescatarme, pero no me pidas algo más. No quiero herirte. No quiero equivocarme, no ahora.
Por lo pronto, podré respirar el día de mañana ese aire contaminado de problemas, mis problemas, y lo quiero inhalar con tanta fuerza que recorra cada centímetro de mi cuerpo y así poder saber como resolverlo. Tengo en quien respaldarme si no logro hacerlo. Pero se que lo haré."
A mis veintiún años la vida no me ha tratado como todos quisiéramos que nos trate, pero en ocasiones el peso de esa lápida es demasiado extenuante. Se que debo de afrontar los problemas cara a cara y arremeter en contra de ellos de una manera tajante, de una manera contundente. Pero, el recuerdo de todo lo pasado es más fuerte, es más lacerante, hiere, duele.
¡Claro, mis ideales! Están ahí, creo que un poco empolvados y creo que tendré que reestructurarlos. Quiero despertar al presente, quiero ser yo y no sólo una visión de mi pasado. Al principio pensé que el ser rebelde, el escupirle al mundo y la sociedad podría traerme buenas cosas; la vida no se maneja a base de anarquías personales, no puedo cambiar el mundo si no me cambio de una manera integral a mi misma. Quise volver a lo de antes, a la represión que me tenía atada a ese pasado infantil que me atormenta hasta estos días y que hasta cierto punto cobija mis desgracias. Pero después de probar el sabor de la rebeldía interna, no hay retorno.
Ahora estoy tratando de acoplar esta confusión, hasta ahora inocua, a mi actual vida. No pretendo ser otra, quiero ser yo misma, una yo misma audaz. Capaz de resolver situaciones complicadas con la serenidad que tienen los grandes. Estoy en una etapa de un gran cambio, que implica el no herir a alguien más, que implica sacrificios y sumisión en aspectos de los cuales podré sacar ventaja. Es cuestión de escuchar y aprender. Pero sin herir, sin herirte. No lo quiero hacer, pero algo, ese algo que siempre está presente en las confusiones me ata a ti. Se que puedo estar agitando la bandera del naufragio y estás ahí para rescatarme, pero no me pidas algo más. No quiero herirte. No quiero equivocarme, no ahora.
Por lo pronto, podré respirar el día de mañana ese aire contaminado de problemas, mis problemas, y lo quiero inhalar con tanta fuerza que recorra cada centímetro de mi cuerpo y así poder saber como resolverlo. Tengo en quien respaldarme si no logro hacerlo. Pero se que lo haré."
Fecha: hasta este momento...
4 comentarios:
Javi!!! siempre lo he dicho tienes talendo y lo sabes...has captado casi todo lo k intento esconder aunk sé que es imposible tratar de disimular lo que me pasa. Gracias, esta lindisisisisimo!!!
Te quiero mucho, eres como la familia pequeñita en colima, k me recuerda por k debe de seguir adelante....
Pues, que te puedo decir, hubiése sido mejor que ese astro natural del cual te refieres, no se hubiera desviado de tu órbita, piensa que un sol más grande la iluminó, y se desprendió de ahí, donde hubiera estado mejor. Recuerda que esos soles tarde o temprano explotan y mueren llevándose a la luna que los siguió, pero a veces esa luna ve que todo era ilusión. El hubiera no existe, nunca digas nunca...
¿Dónde me perdí?
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