miércoles, 12 de marzo de 2008

No a la violencia, no a la mediocridad de pensamiento…

El tema del momento, el que está acaparando poco a poco titulares en noticieros, mesas redondas, pedas y una que otra plática familiar es el de los emos. Y espero sea la última vez que escriba sobre este movimiento, que insisto, me parece una completa tontería.

La violencia en contra de cualquier grupo social, por cualquier razón, es inaceptable. El movimiento emo ha ganado terreno en el ámbito social porque se le ha dado un grado de atención que ellos están buscando. El hecho es que no se justifica la violencia por más tonto, estupido, pendejo que nos parezca esta forma de ser.


La atención que han recibido es tal, que ya existen “reglas” para poder ser uno de ellos. En cualquier buscador en Internet tecleen “como ser un emo” y encontrarán cientos de páginas que les indicaran cómo serlo.


En la página que consulté al azar dan 10 pasos para convertirse en un de ellos, pero el que me llama la atención y es lo que los hace tan “vulnerables” [que es lo que ellos quieren] en su Actitud y Filosofía, y lo escribo textual:


“ACTITUD Y FILOSOFÍA

Ya hemos dejado claro que lo primero en un emo es la apariencia. Ahora vamos con la actitud que debe llevar un emo, y su filosofía de vida. Un emo tiene que dar un aire pesimista, lánguido… Mira la peli de las virgenes suicidas para hacerte una idea.Cuando alguien te hable, puedes mirarlo a través de tu flequillo, pero no hace falta. Puedes hablar sin mirar a la cara, con desgana, sin que se te oiga. Total, te vas a suicidar… Si alguna vez hablas, puedes comentar lo chungo que lo pasas en tus viajes en avión (¿tú sabes lo que es estar 8 horas en un avión, sin poder mirar el myspace?). Cuando alguien te pregunte que qué tal estás, puedes utilizar alguna de estas expresiones: vacío, afligido, no sé cómo estoy, de domingo por la tarde…Debes actuar también como si fueras gay, si eres chico; y como una empollona “que no liga” si eres chica. Tu anterior novia te pudo haber dejado por un tío más macho, y tu novia de ahora sí que entiende por qué estás tan mal, tan depresivo… Y a tí, que eres chica… ¡Es que no había ningún chico que te entendiera! Menos mal que conociste a tu pareja ahora, porque si no, te habrías cortado las venas.
He aquí un ejemplo de un emo: cortándose las venas, casaca negra 3 tallas menor (véase la tirantez de los botones en la zona de la barriga y la manga corta), foto de un grupo emo firmada en la pared, parche de los Misfits…” [http://www.alababarada.com/?p=536]


Los emos están tratando de ser grandes en la medida que son agredidos, y lo interpreto de la siguiente manera: la satisfacción de un emo es directamente proporcional al número de agresiones recibidas.
Ya ni caso tiene darles tanta importancia, si quieren ser los más miserables del mundo, pues que lo sean y ya. Si quieren hacerse heridas con navajas, cuchillos y demás objetos cortantes, pues que se corten las manos si quieren. La cosa es, no hacerles caso, porque eso es lo que quieren, ser agredidos, sentirse que nadie los quiere y de esa manera ser “mejores”. Respetemos su manera de pensar. Su manera de ser. Matemos dos pájaros de un tiro, no a la violencia en contra de ellos y de esta manera ellos no serán el foco de atracción.


Ya basta de comportamientos bárbaros. Ya basta de tanta violencia.

2 comentarios:

Miguel Aram dijo...

"La satisfaccion de un emo es directamente proporcional al numero de agresiones recibidas" Bastante bueno, y creo que bastante cierto!

Buen post!

Saludos!!

Miguel Aram dijo...

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